martes, 30 de mayo de 2017

El Huésped






Querida Vera:

Hoy es mi último día en tu vida. Me voy sin dejar rastro alguno. Espero no encontrarnos nunca más. A partir de ahora, comienza una segura etapa para ti, sin mí. Pero no olvides cómo llegué a tu vida y todo lo que has sufrido en el último año.
Tenías tan sólo quince años cuando comenzaste tu relación con él. Querías ser parte de aquel grupo de amistades, y lo conseguiste. Supongo que, a esa edad, te hacía sentir integrada, poderosa, destacada,… Lo probaste en tus labios y dejaste que poco a poco perteneciera a tu vida.
Cuando iniciaste tus estudios universitarios, en Magisterio, tu relación se volvió más adictiva. Cada vez lo necesitabas más, te calmaba en momentos de estrés en momentos de tranquilidad. Ese era tu mayor apoyo durante el estudio, en el descanso,… Tu fiel compañero cuando otros te fallaban. A pesar de los consejos de tus padres y amistades, seguiste con él. Sé, Vera, que te fue muy difícil decirle que “no”. No terminaste nunca tus terapias, hacías caso omiso a tu familia y a tu médico. En definitiva, no supiste interpretar las señales.
La mañana del 5 de abril te despertaste marcada. Apenas tenías voz. Afortunadamente, pediste ayuda. Te hicieron todas las pruebas necesarias: radiografías, ecografías, analíticas,… Pasados unos días, te llamaron con urgencia.
“¡Preséntese en su centro de salud!”.
Aquí se originó tu verdadera pesadilla. Pensabas que eras invulnerable y que a tí no te iba a tocar.
Lo siento, no quise, pero tú fuiste quién me llamó. Corrí rápidamente a tu lado y no me separé de tí hasta hoy.
Te diagnosticaron cáncer de garganta a consecuencias de él. Sí, Vera, te escuché llorar. Y sí, también a tu madre, a tu padre. A todos los escuché y no hice nada. Sé que te he hecho daño pero tendrás que reconocer que he sido el único que logró sacarlo de tu vida. Poco a poco me instalé en tu vida para quedarme este tiempo.
“¿Por qué a mí?, ¿por qué a mí?,…” – te repetías una y otra vez.
Te confieso en esta carta que lo último que deseaba era verte sufrir. Puede que a veces me pase y haga más mal que bien.
Recuerdo la noche en que me hablaste. Me dijiste que íbamos a pasar juntos un tiempo. Pero sólo eso, un tiempo. Después me tendría que ir y a cambio, tú lo dejarías. Te confieso, además, que me puse muy contento que le echaras valor a todo este proceso. Aprendiste la lección que vine a darte y lo has hecho muy bien. Has luchado y te mereces este final. El que siempre deseo, aunque no siempre lo consiga.
Te deja tu amigo “el huésped”. Sí, le cogí cariño al nombre que me pusiste, puesto que en el fondo es lo que soy. Ya me voy para siempre de tu vida y te prometo que mañana, tu diagnóstico será: “limpia”. Cumpliré el trato. Te deseo lo mejor. Cumple tus objetivos y tus metas en esta vida, pues sólo tienes una. Seguro que serás buena enseñante.

Se despide,
Cáncer.

P.D.: No me olvides para no volver.

Diego Medina Saavedra

IES Guía 3º B
Santa María de Guía (Gran Canaria)

Ganador del concurso de relatos breves por el Día Mundial sin Tabaco









Corto realizado por el alumnado del ciclo de Imagen y Sonido del IES Guía, de Santa María de Guía, en Gran Canaria.

Publicado el 24 de mayo de 2017 con motivo del Día Mundial sin Tabaco
Creado en una de las técnicas de Stop Motion, Pixilación. 
Curso 2016/2017. 
Profesora, Alicia Vega Rodríguez.


domingo, 28 de mayo de 2017

¿Cuál es el futuro de la promoción de la salud comunitaria desde la perspectiva de activos en salud?

.
Fue la pregunta de la mesa de debate plenario que cerraba el #congresoactivosgrx
Estaban Mariano Hernán, Patricia Escartín, Rafa Cofiño y Sergio Minué.
¡Qué cuarteto de cracks!.
.
La intervención de Sergio que plasma en esta entrada en su gerentedemediano, me llevó el pensamiento al Congreso de Bioética en la ULL de marzo pasado.
En dicho encuentro sobre vulnerabilidad, justicia y desigualdad existieron aportaciones fabulosas y me gustaría recordar varias.
Florencia Luna habló de colectivos o poblaciones vulnerables como conceptos extensibles a todos los seres vivos respecto de otros; son etiquetas o estigmas profundos, variables y severos; que mejor sería hablar de capas múltiples y diferentes de vulnerabilidad sobre las que sí se puede actuar. 
Ángel Puyol habló de la solidaridad desde perspectivas de sentimiento de grupo, de una virtud moral y de un deber de justicia; fue potente su expresión de que: "en una sociedad más justa..." para que concluyéramos que: la solidaridad no sería necesaria. 
José Antonio Seoane que generalmente sólo es justo en salud aquello que se quiere proteger y eso depende de lo que es importante en cada sociedad. 
Sara Darias sobre el sentido de tratar enfermedades para después devolverlo a las condiciones de vida que lo hicieron enfermar. 
Denise Gastaldo sobre que la salud no es exactamente un derecho humano, sino tan solo un derecho ciudadano adaptado a los miembros de cada sociedad. 
Cristina Moreno que las nuevas competencias de los profesionales para luchar contra la desigualdad y que emanan de la indignación son: coraje moral y resistencia.
.
Y recordando el Encuentro PACAP de 2014, también celebrado en Granada, donde Juan Irigoyen nos habló sobre los ganadores (resistentes y rebeldes al cambio) y los perdedores (ignorados y que no tienen voz)
Nos preguntó entonces: ¿qué podemos hacer ante estos escenarios cada vez más intencionadamente negativos?.
.
Y, ¿cuáles son estos entornos?: unos mercados laborales duales, unas privatizaciones y desuniverlizaciones, unas desigualdades, inequidades y peores determinantes sociales de la salud,  unos peores  representantes de los intereses en salud que miran los aspectos comerciales de la promoción de estilos y hábitos de vida saludables, unas mayores dificultades en la participación a nivel micro o una estatalización y clientelismo de la participación.
.
Y, ¿qué podemos hacer?, ¿qué nos propuso?
.
  1. Reprofesionalización de los profesionales sanitarios con nuevos roles y perfiles.
  2. Microdesobediencias en nuestros respectivos entornos hacia todo lo que no abogue por una mejora de la salud, la calidad de vida y el bienestar. 
  3. Presencia en las redes sociales y aceptación de otras realidades. 
  4. Relacionarse con las participaciones desestatalizadas emergentes.
  5. Mantener y hacer progresar cualquier participación e intervención comunitaria. 
.
Pues eso.
Que hay muchas cosa que podemos hacer y que no estamos solos.
Hay muchas voluntades y células grises con empatía, sensibilidad y compromiso.
.
Por cierto, que me encanta esta nación formada por nosotros.
.


Juan Antonio García Pastor
Médico de Familia y Comunitaria en Santa María de Guía (Gran Canaria)
Responsable del PACAP de Canarias

.

.


jueves, 11 de mayo de 2017

Tiempo de Alianzas

Alejemos los tiempos de la soledad y de los héroes. Ahuyentemos a los hidalgos que nos empujan a luchar contra los molinos. Despojemos nuestro ímpetu de arrebatos épicos. Descarguemos nuestro ego de la posesión de la verdad.

El presente y el futuro de la medicina comunitaria sólo es y será posible con el fruto de las alianzas. Es la hora de romper las barreras que impiden participar a nuevos compañeros de viaje; es el momento de identificar a aquellos que moran próximos y que no son reconocidos como actores principales; es el tiempo de desprenderse de la ortodoxia del método, para abrir el entendimiento y conseguir una comprensión más universal del mensaje.

Las alianzas empiezan a conformarse. Persisten algunas desconfianzas, pero hay avances esperanzadores. Cada vez las barreras están más difuminadas y los actores acuden desde todos los entornos. Los encuentros y desencuentros ayudan a acortar las distancias. Las verdades cada vez son más relativas. Las penas por lo mucho pendiente se compensan con los frutos cosechados y las sonrisas de los presentes.

Parece que todos desean remar hacia la misma orilla. La Escuela Andaluza de Salud Pública comparte liderazgo al convocar el Congreso de Activos para la Salud Comunitaria, con el propósito de compartir conocimientos sobre cómo promover la salud y el bienestar con personas y poblaciones.

Todo está un poco más cerca.

Asensio López Santiago
Especialista en Medicina Familiar y Comunitaria.
Director de la revista Comunidad

Presentación del último número de la revista Comunidad
Marzo-Junio 2017



En recuerdo a Miguel Hernández en el setenta y cinco aniversario de su muerte, compartiendo su canto a la esperanza 

        
Tengo estos huesos hechos a las penas
y a las cavilaciones estas sienes:
pena que vas, cavilación que vienes
como el mar de la playa a las arenas.

Como el mar de la playa a las arenas,
voy en este naufragio de vaivenes,
por una noche oscura de sartenes
redondas, pobres, tristes y morenas.

Nadie me salvará de este naufragio
si no es tu amor, la tabla que procuro,
si no es tu voz, el norte que pretendo.

Eludiendo por eso el mal presagio
de que ni en ti siquiera habré seguro,
voy entre pena y pena sonriendo.








Hola, soy Toñín

Hola, soy Toñín García. Soy el protagonista de este curso de Atención Comunitaria de la semFYC y elaborado por el PACAP. ...